Una boda en clave hipster puede verse casi como un sinónimo de boda campestre: el contacto con la naturaleza está siempre presente, lo que se ve especialmente en los lugares que se suelen escoger para la celebración, como un bosque, una ermita apartada, un campo, etc.
Trasladad vuestra filosofía de vida al día de vuestra boda: naturalidad, diversión y nada de normas estrictas; sed vosotros mismos.
Con este tipo de boda los novios lo que buscan es extender su filosofía de vida a un día tan especial. Son bodas con aire desenfadado, divertidas y no siguen normas de etiqueta o protocolarias.
A este entorno natural sólo hay que añadir la decoración, que aunque parezca que todo está colocado al azar, no es así; cada rincón, cada detalle, están siempre muy estudiados. Se entremezclan elementos vintage para conseguir un ambiente informal y romántico: las luces en los árboles, las pizarras con mensajes divertidos, banderolas, alpacas y sobre todo muchas flores distribuidas en botellas de vidrio, en frascos, pero no cualquier tipo de flor sino siempre flores silvestres (violetas, margaritas, lavanda, paniculata, mimosas) entremezcladas en ocasiones con las flores de temporada.
Y, cómo no, la novia no es una novia tradicional, sino que huye de lo común: utiliza vestidos muy sencillos y naturales, melena al viento adornada con corona de flores o recogido con trenzas… En definitiva, una novia que sigue al pie de la letra el estilo boho chic.
El novio también se sale de lo normal. Su look es muy desenfadado. Puede utilizar traje pero no lo hace de manera tradicional sino que tiene libertad a la hora de escoger su atuendo: puede elegir el color que quiera para su traje, suele llevar tirantes, las pajaritas cuanto más originales mejor, corbatas finas, prendidos con formas divertidas y como calzado lo que quieran, incluso zapatillas deportivas.
Su aspecto físico destaca por que suelen llevar un peinado aparentemente descuidado y a veces incluso una frondosa barba, y nunca faltan las gafas de sol.
En la decoración del espacio donde tendrá lugar el banquete se busca también esa apariencia descuidada, colocando por ejemplo mesas de madera natural que dan un aspecto envejecido y vintage y eligiendo una vajilla que puede no ser la misma para todos los comensales, aunque huelga decir que dispuesta de forma que combine entre sí.
En cuanto al banquete, más que un menú clásico lo que suelen elegir los novios es algo menos serio, como por ejemplo las estaciones de comida, entre las que los invitados elegirán lo que más les apetezca probar. Incluso ahora empiezan a verse bastante las llamadas food trucks o camionetas de comida ambulantes. Y para el postre nada mejor que unas naked cakes o tartas desnudas.
Para la celebración destacan los photocall con caretas y bigotes, que darán un toque muy divertido a vuestro álbum de fotos.
Como detalle para vuestros invitados nada mejor que una bonita planta en un macetero o recipiente de cristal.
Y como colofón, uno o varios grupos de música en vivo, con vuestras canciones preferidas y ya sólo nos falta decir
¡que vivan los novios!
©BS Redacción